Rastros

sábado, 29 de diciembre de 2012

¿Y qué si esto lleva al fin? Es decir, de Lovesick en si mismo. Pues ya no me siento enferma de odio, de desamor, de insomnios. Duermo en paz, descanso en sus brazos en cada abrazo y cada beso, cada beso es único e irrepetible. Quizá sea esto a lo que se refería tanta gente a la que traté de idiotas, con ideas utópicas e idílicas... ya cada paso que doy es esperando encontrarla, para que me quiera, para quererla.
¿Y qué si esto lleva al fin? Realmente no lo lamento.